¿Podrías ser un poquito más blanca?

Katerine Santo
El Circulo
Published in
3 min readAug 7, 2020

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Tengo una muy buena amiga llamada Eve. Tiene un corazón como un castillo, es un rayo de sol, una mujer maravillosa hecha de energía, luz y amor. Hemos tenido muchas conversaciones de esas que duran horas y me ha hecho un regalo increíble sin ni siquiera darse cuenta.

Me ha dado el regalo de ayudarme a entender quién soy. Me ha ayudado a entender hasta qué punto mi color me define y representa, independientemente de lo que hay detrás de mi piel. O debería decir nuestra piel. Ambas somos negras y ambas hemos crecido en países donde la mayoría de la población es blanca.

Así que gracias, Eve, por inspirar este texto y por ayudarme a entender quién soy. Querida lectora, querido lector, espero que tú también conozcas a tu Eve alguna vez.

Dos bocas de mujeres negras sonriendo. Collage
Sonrisas negras

Me han dicho cosas como…

Alísate el pelo. Estos productos huelen fatal y puede que te quemen el pelo y el cuero cabelludo, pero tendrás el pelo liso, como el pelo de la gente blanca.

Una amiga de la familia, cuando yo tenía 12 años.

Cuando compres base de maquillaje, compra un tono más claro que el de tu piel, así tu cara parecerá… un poco menos negra, ¿sabes?

Una empleada en una tienda de cosmética, cuando yo tenía 18 años.

Mete el labio de abajo para dentro niña, que pareces una africana con el labio así colgando.

Un familiar, cuando yo tenía 8 años.

Haz estos ejercicios para tener el culo más pequeño. Bueno, o ponte estos vaqueros para que al menos lo parezca.

Una amiga, cuando yo tenía 15, 20, 25 años.

No hables tu idioma en público. La gente pensará que no sabes hablar español.

Un antiguo casero, cuando yo tenía 23 años.

No te lleves esa comida al trabajo, llévate un bocadillo o lo que sea que coman tus compañeros blancos en el trabajo.

Un compañero de piso, cuando yo tenía 24 años.

Vamos a ver esta nueva serie, aunque no sale gente como tú. Pero te va a encantar.

Un antiguo novio, cuando yo tenía 20 años.

Vamos a ver esta nueva película, aunque la gente como tú sólo hace papeles como la que limpia, el esclavo, la prostituta, el ladrón, el asesino… Pero te va a encantar.

El mismo tipo, la misma edad.

Estos panchitos y extranjeros vienen sólo a robar y a delinquir.

Un familiar, cuando yo tenía 29 años, sentado conmigo y con mi pareja cuando ambos vivíamos en un país en el que no habíamos nacido.

No salgas a protestar como una persona salvaje, maleducada e insensata que no piensa en los demás.

Un desconocido, hace unos meses. Acababan de asesinar a George Floyd y el mundo estaba (y aún está) luchando contra una pandemia.

Esta es mi respuesta a esas personas

No puedo ser más blanca porque soy negra. De verdad que no quiero alisarme el pelo. No quiero parecer una mujer blanca.

Tengo el pelo, los labios y el culo grandes. Pues sí, y lo que es más importante, unos valores y un corazón igual de grandes.

Digo todo esto en español, aunque lo podría decir en otros dos, cuatro o diez idiomas. Pero como quiero que me entendáis todos, lo digo en español: mi comida es la ostia. Está hecha con amor y esfuerzo, y nutre tanto mi cuerpo como mis raíces y mis recuerdos.

No sólo evitaré ver series y programas que ignoran o degradan a la población negra, sino que además buscaré, encontraré y veré series y programas que hablan de la vida de personas como yo, que estén creadas, dirigidas o producidas por gente como yo.

Haré un esfuerzo por buscar y consumir música que me mire a los ojos, que refleje mis vivencias y las de otras personas negras. Así es como pienso apoyar a artistas y creadores que sepan ver mi realidad.

Ah, y desde luego que saldré a protestar por el asesinato de George Floyd, por el de Lucrecia Pérez y por todos los que pueda. Saldré como la persona tranquila, educada y empática que soy. Cuando los demás dejen de aglomerar las playas y las discotecas durante una pandemia, cuando dejen de matarnos, cuando dejen de silenciarnos, de mirarnos con desprecio y con desconfianza, puede que entonces deje de salir a protestar.

Hasta entonces, por favor, que dejen de decirme cómo ser negra.

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